¿Y por qué con los alimentos?
Por una sencilla razón, pero de mucho peso, el alimento marca una diferencia muy grande en el proceso de maduración de los niños y en el rendimiento escolar.
Seguro que has escuchado alguna vez esa frase de “somos lo que comemos”, pues es más cierta de lo que te puedes imaginar de entrada. Aunque esa frase sea ya antigua para el ritmo que llevamos en nuestra sociedad, fue en su momento más una premonición que una verdad como entendemos hoy en día.
En ese momento no había ni estudios ni experimentos sobre los alimentos o los que había eran tan básicos que no nos podemos apoyar en ellos para llegar a entender la magnitud de ser lo que comemos.
Tengamos en cuenta que todos los estudios patrocinados por alguna empresa de alimentos procesados, tampoco no puede dar una garantía, básica y comprensiblemente porque hay un conflicto de interés evidente.
Si vendo bebidas azucaradas ya me encargaré de hacer un estudio adecuado para no enfocarme en las enfermedades que causa el azúcar industrial a largo plazo en el sistema nerviosos y por ende a los órganos irrigados por estos, sino que me enfocaré en aspectos más inmediatos como la vitalidad que pueden dar, la sensación de bienestar o cualquier refuerzo o beneficio aparente que esta droga pueda ocasionar de manera inmediata, aunque esté hipotecando nuestra salud futura.
Encontrar estudios neutros es quizás lo más complicado pues como ya hemos dicho obedecen a intereses de patrocinadores y a valores de mercados para dirigir hacia un consumo u otro.
Parece un tema mucho más profundo de lo que a priori se puede uno imaginar.
Y efectivamente así es, y podemos profundizar más o mucho más según quieras descubrir.
El primer factor a tener en cuenta y que ya sabemos desde hace tiempo, es que aparte del daño que generan los envoltorios al planeta, el producto procesado solo alimenta, no nutre.
¿Qué es el alimento?
El alimento es, según la RAE: Conjunto de sustancias que los seres vivos comen o beben para subsistir.
Y razón no le falta en la primera definición, pero en la segunda nos dice: Cada una de las sustancias que un ser vivo toma o recibe para su nutrición.
Y esto sí que es incierto por no decir directamente que es falso. No todo aquello que tomamos es para nuestra nutrición, no todos los alimentos nos nutren.
Alimentarse de procesados llenos de químicos, o directamente compuestos únicamente de químicos, con saborizantes para generar adicción a ese sabor concreto y produciendo reacciones químicas en nuestras mentes de placer para que sigamos consumiendo sin saciarnos; No es nutrirse.
Generar un exceso de peso en la población para que aparezca un exceso de población microbiana en los intestinos y deteriore nuestro organismo; No es nutrirse.
Nuestro cerebro y nuestra capacidad de razonar depende de dos cosas, una respiración adecuada para que en el bulbo olfatorio se generen las células madre de las futuras neuronas, y de una nutrición básica de alimentos de verdad, directamente de la tierra, o elaborados artesanalmente a partir de estos.
Las personas que se nutren, se regeneran. Las personas que se alimentan, se degeneran.
¿Y los niños?
Pues los niños que es lo que nos interesa aquí y ahora, cuando solo se alimentan, no disponen de los nutrientes principales para que su cerebro funcione correctamente y tienen un mal rendimiento tanto escolar, como un crecimiento deficitario. La desnutrición provoca faltas de atención, ansiedades, tendencias adictivas, déficits emocionales sumados a la exposición prematura a las pantallas y un sinfín de etiquetas que no nos gusta poner, pero, que están ahí, nos encontramos con una infancia llena de desequilibrios.
¿Quieres descubrir más cosas?
Pues hay una barbaridad de información disponible para tomar decisiones y precauciones como la manera de nutrirse, no es lo mismo estar comiendo atentos al proceso nutritivo y pudiendo incluso sentir la reacción del cuerpo al recibir una u otra energía, que estar sentados delante de una pantalla o en un ambiente tenso y ya ni te cuento si se come entre gritos, prisas y demás.
Te desafío, sí has leído bien; te reto a que vayas a la nevera y cojas un alimento nutritivo que sea de tu gusto, ya sea animal o vegetal, pero que no sea procesado. Cierra los ojos y mastica durante veinte segundos, observa y obsérvate.
Después de sorprenderte, coge un alimento procesado, cierra los ojos y mastica durante veinte segundos más, observa y obsérvate.
Acabas de descubrir que el alimento esta vacío y que la comida de verdad nutre.
El rendimiento escolar esta directamente relacionado primero a la comida, y segundo a los hábitos.
Recuerdo a un niño que le habían diagnosticado TDAH y querían drogarlo para mejorar su comportamiento, básicamente para que no molestara hablando en plata. Le hice un estudio de hábitos y descubrí que por la mañana se tomaba dos pastas procesadas y un vaso de leche con 4 cucharadas de azúcar en un vaso medio (250 ml.).
Hice un cálculo aproximado con los padres de lo que ingería ese chico cada día. Para un peso de 30 kilos dos pastas, 250 ml de leche y los gramos correspondientes de azúcar vacío en 4 cucharadas.
Le propuse a los padres que al día siguiente comieran lo mismo, pero proporcional a su peso; 6 pastas vacías, 750 ml de leche vacía y las 12 cucharadas correspondientes de azúcar, y que me llamaran después del desayuno a ver como se sentían, está claro que no hizo falta, modificaron los desayunos y junto al restablecimiento de otros hábitos, en esa casa no se volvió a ver ni al TDAH ni a ningún sucedáneo parecido.
Déjame aclararte que especifico vacío, porque esos alimentos, si te fijas bien eran todos procesados, vacíos de nutrientes.
La mejora del rendimiento escolar empieza por la nutrición y por eso un año más Esfera realiza su jornada de puertas abiertas dónde sus profesionales comparten de forma gratuita sus charlas o talleres.
Una oportunidad única este año para acercarse, conocer, preguntar y aprender, y eso ocurre por novena vez.
La recogida de alimentos es para Asalma, una asociación sin ánimo de lucro que hace llegar a los niños lo que traen las personas que asisten a las puertas abiertas para su nutrición y su mejor rendimiento diario y no solo escolar.
Muchas gracias por tu atención.
