¿Dónde crees tú que pasas más horas habitualmente?
Hablaremos más tarde del estilo Feng Shui porque ahora lo que nos interesa es responder esta intrigante pregunta, y es que sin lugar a dudas y en condiciones normales es en el dormitorio. Básicamente, porque aparte de las horas de dormir que suelen ser entre seis y ocho diarias, le sumamos las horas que pases ahí y eso nos sale a unas cuantas horas que pueden llegar a ser incluso, casi, la mitad del día.
Puede que en algún caso alguien diga que se pasa más horas en el trabajo y dentro del trabajo en el mismo habitáculo más horas que en el dormitorio, pero en este caso y ya para afinar mucho tendríamos que restar los fines de semana y festivos del trabajo, mientras que dormir, es de cada día y normalmente en el mismo habitáculo.
De ahí la importancia que tiene este espacio y por eso estamos especializados en diferentes aspectos ambientales que nos afectan directamente por la exposición prolongada que tenemos a ese espacio imprescindible de nuestra vida y bienestar.
¿Cuántas cosas deberíamos tener en cuenta para nuestro lugar de descanso?
¿No todos opinan igual?
Hay una multitud de aspectos a tener en cuenta; siguiendo un orden aleatorio; la primera es si dormimos solos o acompañados y aunque muchas veces no se tiene o no se quiere tener en cuenta; dependiendo con quién estemos durmiendo nuestra salud puede verse afectada.
Hay energías y biorritmos incompatibles que demasiadas horas en contacto pueden acabar desgastando la energía vital a una o a las dos personas que están dentro del espacio vital de la otra.
La segunda son las posibles geopatías o desequilibrios que puede haber en la estancia, dependiendo sobre todo dónde hayamos situado la cama. Eso se estudia en las universidades de arquitectura y lo mejor es hablar con un especialista o aprender a usar el péndulo o las varillas de radiestesia que quizás, si no tienes el hábito del uso neutro del péndulo, serán más fáciles de manejar y más fiables a priori.
Otro aspecto a parte de su ubicación, es la dirección de la cama y la habitación en general. Contrariamente a lo que se cree, hay que experimentar con cada persona y orientación pues si en mi caso me favorece el cabecero al norte, hay casos que les favorece justo al revés.
Imagina una pareja que disponga las dos orientaciones; técnicamente mejor camas individuales y orientaciones acordes a cada uno que, aunque pueda parecer raro al final favorecerá su descanso y su relación.
Según el autor que leas defenderá que si el norte, que si el sur, que si hacia la puerta celestial, que si hacia la oscuridad y el frío y entraremos en un callejón sin salida desde dónde no sabremos qué criterio escoger pues hay casi tantas opiniones como autores. Lo dicho, experimenta pues eres un ser único y tus factores también los son.
Direcciones aparte, no recomendamos que sobrecargues mucho el dormitorio, evita el máximo de conductos eléctricos, enchufes y luces sobre todo en la parte de la cabeza. Apaga los aparatos electrónicos que generan unas ondas y puede que más cosas sobre ti, aunque no las conozcas, mientras pretendes descansar.
Televisiones y aparatos parecidos, prohibidísimo y ya no solo para tu salud, sino para la ubicación y desarrollo de la pareja en sí y en sus vínculos tanto a nivel físico, como emocional, como psicológico. Ver una película juntos en el dormitorio, es una sentencia a la interrupción del hábito de la comunicación y entrar en una fase no muy recomendable de aislamiento del vínculo.
¿Qué es y para qué sirve el Feng Shui?
Otro aspecto muy importante es la composición de los materiales, y aquí hemos hecho una elección a través de Amazon para que puedas ver y comparar de manera fácil. ¿Por qué hemos escogido esta plataforma?, por la facilidad y la variedad de que se contemple lo que estamos contando y porque hemos encontrado una página maravillosa que nos filtra mucha búsqueda ahorrándonos tiempo.
Te has preguntado alguna vez ¿cómo debe ir la cama según el Feng Shui? Allí respondemos algunas de las dudas; tenemos las sabanas de algodón, los cuadros para el cabezal con imágenes imprimidas conscientemente para el Feng Shui, colores cálidos para las sábanas, nórdicos con fibras antiácaros entre otras cosas y almohadas de aloe vera y de formas ergonómicas para el buen descanso de las vértebras más castigadas como son las cervicales.
Una variedad que sin duda podrás adecuar a tu situación, déjame recordarte tanto la importancia de lo que compramos, como su calidad y su composición para armonizar al máximo el dormitorio que es donde descansamos.
También podemos añadir armonizadores o minerales como la Charoita, el Quantum Quattro o la Shungite que tienen propiedades muy acordes a las frecuencias actuales que tenemos en la tierra. (Suscríbete AQUÍ al canal de YouTube de Esfera para descubrirlos).
¿Y si quiero crear un espacio idílico?
Además, puedes añadir, el aroma consciente, ya que este nos proporciona un plus también muy eficaz, sobre todo si tiene una calidad excelente cómo es el caso de los productos que podemos obtener en noha-do y donde además te pueden asesorar en tu elección si les cuentas para que es y como es tu dormitorio u otra estancia donde pases mucho tiempo.
El aroma inhalado activa áreas de nuestra mente al mismo tiempo que apacigua malestares y genera en el bulbo olfatorio las células madre que se convertirán en neuronas en los próximos días.
A todo ello, le podemos sumar una luz tenue y si puede ser gradual con alguna lámpara de sal como ya comentamos en su momento, no te das cuenta y acabas convirtiendo tu estancia en tu paraíso terrenal, en tu templo de calma y serenidad donde regenerar tu cuerpo gracias a un buen descanso largo y profundo.
Cuál es el estado final de todo esto: descansas mejor durante las horas de sueño y te sientes mucho mejor durante el resto de horas. Más alegre, con más ganas de hacer cosas, con mejor vitalidad y por muy fuerte que sea la que esté cayendo fuera, tú tienes tu espacio sagrado para regenerarte a ti y a los tuyos.
¿ Y si con todo esto aún tengo dudas?
No dudes en preguntar en nuestra página de contacto y te acompañaremos lo mejor que sepamos.
