La responsabilidad de la enfermedad.#1

Facebook
Twitter
WhatsApp
Telegram
LinkedIn

Inspira profundamente, expira suavemente, vuelve a inspirar, suelta el aire tomando conciencia del momento presente en el que estás aquí y ahora.

Durante unos segundos párate a sentir:

Si tienes prisa deja de leer y ya lo harás más adelante cuando sea el momento.

Si estás haciendo otra cosa ahora mismo y has abierto de causalidad está página deja de leer y ya lo harás más adelante cuándo toque que recibas esta información en condiciones óptimas.

Céntrate en leer este texto y en recibir la información que voy a traspasarte cuando puedas poner toda tu atención en él, pues hay algún concepto que puede cambiarte para siempre.

Todos somos responsables de más cosas de las que podríamos pensar a priori.

La responsabilidad de la enfermedad

Trataremos el concepto de la salud y de la enfermedad; sobre todo de la responsabilidad de la enfermedad.

No tengas prisa ni en deducir antes de recibir toda la información ni en mirar superficialmente este concepto que es la primera vez que se escribe en un texto: La responsabilidad de la enfermedad.

Si has llegado hasta aquí, primero que no es de casualidad y segundo es que ahora estás en una atención casi plena con las siguientes palabras que te van a llegar en toda su conciencia a tu realidad.

Inspira y expira de nuevo para relajarte todo lo que puedas y tener toda tu atención y comprensión y tener todas tus habilidades despiertas para los siguientes instantes de vida.

Cuando nos pausamos relajándonos, nuestras capacidades cognitivas aumentan y nuestro nivel de percepción y comprensión se concentran y estamos en nuestra máxima y mejor versión.

Tenemos el concepto de la salud totalmente desenfocado.

Absolutamente erróneo.

Y sobre todo el concepto de la responsabilidad de la salud y por ende de la enfermedad.

Hemos sido educados, hemos permitido ser educados en una irresponsabilidad plena en nuestra propia salud.

Pastilleros interminables

Ni somos ni nos hacemos responsables; ni de nuestra salud ni de nuestra enfermedad.

Hemos crecido eludiendo toda responsabilidad y cediéndola a terceras personas. Simplemente cuando nos sentimos mal, no buscamos, no aprendemos y no crecemos en ese proceso del desequilibrio que nos propone nuestro cuerpo.

Aún no hemos entendido que la enfermedad es un proceso de vida y que transitamos por ella en nuestro proceso evolutivo y madurando como personas.

Párate un instante a releer pausadamente y sintiendo como resuenan esas palabras en tu interior, no tengas prisa por acabar hoy de leer este escrito. Tampoco nos han enseñado a leer correctamente y así vamos dando tumbos como pez por el desierto.

¿Cuáles son las causas por las que nuestro cuerpo y nuestro organismo se manifiesta y se desequilibra? ¿Por qué protesta? ¿Qué me quiere decir que no me estoy dando cuenta porque me paso el día automáticamente con mis actividades programas y reprogramas sin tiempo a respirarme?

No nos enteramos cuál es la naturaleza y origen de la alteración de nuestra salud, y eso es muy importante porque justamente eso, la etiología de nuestra enfermedad tiene un significado y una razón de ser.

Y que, además, siempre irá a más si no cambiamos nuestra actitud y por lo tanto nuestra dirección de vida vital.

¿Por qué digo y repito que no somos responsables de nuestra enfermedad?

Pues porque simplemente nos vamos a buscar a otra persona que nos de soluciones lo más inmediatas posibles, que nos aporte parches para seguir adelante, corriendo y corriendo por la vida sin pasar por ella y sin pasar conscientemente por el proceso evolutivo que nuestro cuerpo nos plantea.

Entendemos la enfermedad y entendemos la salud como un proceso en el que nosotros no tenemos nada que ver, somos las víctimas y no los creadores de ese desequilibrio, ¡para eso están los «profesionales de la salud» que harán que vuelva a un estado óptimo!, y así eludo cualquier responsabilidad y aprendizaje sobre lo que ha ocurrido y por qué ha ocurrido, pues déjame decirte que ¡eso no funciona así!

Lo peor de todo es que la enfermedad o alteración de nuestra homeostasis, con este sistema que utilizamos de eludir nuestra responsabilidad, generalmente, por no decir siempre, va a más y va aumentando su radio de desequilibrio y su gravedad pasando de una célula a otra y de ahí creciendo a los órganos y al final afectando a los sistemas hasta que ya nuestro cuerpo no tolera más la toxicidad que le plantemos y se derrumba en la muerte.

Actualmente en esta educación irresponsable de la enfermedad, buscamos primero a través de medicación externa y rápida una reacción efectiva que nos vuelva a a nuestra homeostasis, y eso o no ocurre u ocurre temporalmente.

Lo que muchas veces no sabemos es que lo que hacen esas medicaciones externas es lo mismo que haría el laboratorio de nuestro cuerpo con una actitud y un tiempo personal dedicado a la comprensión y los cambios vitales adecuados.

la responsabilidad de la enfermedad en nuestro organismo
¿Conoces nuestro organismo?

¿Y qué aprende nuestro organismo?

Lo más fácil y obvio que igual ya te has imaginado, deja de segregar en su laboratorio interno aquello que se suministra externamente por lo que se atrofia y deteriora esa capacidad, pasando de ser un organismo evolucionado y rico a uno involucionado y pobre.

Hablemos del ejemplo más común y que aumenta progresivamente con los años y va pasando de una pastilla a toda una planificación de pastillas que requiere de pastilleros para saber la cantidad y el orden en las tomas de mañanas, tardes y noches haciéndonos seres adultos, dependientes e intoxicados.

Nuestro organismo dispone de las glándulas suprarrenales que pertenecen al sistema endocrino y que son las responsables de segregar las hormonas necesarias para aplacar cualquier tipo de dolor agudo que sintamos, ya sea endógeno o exógeno.

¿Y qué hacemos cuando algo nos duele o vemos a alguien que le duele algo? Debilitar nuestra producción hormonal tomando una pastilla para que no sintamos nada y no tengamos que sufrir. Pobrecitos de nosotros que nos han deseducado en la capacidad de sufrir y de soportar el dolor.

¿Cuál es el resultado?

Cada vez soportamos menos el dolor porque nuestras glándulas dejan progresivamente de segregar las hormonas que antes cumplían con esa función y hoy ya no. Y así con el resto de procesos de enfermedad y desequilibrios. Nos vamos atrofiando en todos los sentidos.

Los estudios médicos están ahí y así lo corroboran.

Solo hay que ir a zonas geográficas de guerra para ver el nivel de dolor que los seres humanos pueden soportar ahí, y que me consta que han llegado a operar con un solo calmante y sin anestesia una cadera girada, por ejemplo, o ir a cualquier ciudad con todas la comodidades y recursos socioeconómicos actuales y que se van poniendo la antitetánica y tres días de calmantes porque se han pinchado con un alfiler.

¿Dónde está la diferencia?

En la adaptación al medio, y eso nos enseña que estamos inadaptados al medio real, al de la vida. Vivimos saturados de recursos para caer en la irresponsabilidad de la enfermedad, generando un presente placentero con el mínimo de esfuerzo e hipotecando un futuro devastador de sufrimiento y secuelas por nuestra irresponsabilidad.

Nuestro planteamiento de salud, tanto en su sistema y educación no es ni un buen ejemplo ni una buena opción.

Empecemos a ser responsables y aceptar que pasamos por diferentes etapas de maduración, de evolución y crecimiento durante la vida y que, en esos procesos, quizás tu cuerpo se quiera comunicar contigo de que hay cosas que no están en su lugar. Escúchalo o gritará cada vez más fuerte hasta que le hagas caso.

Cuídate.

Recuerda que la SALUD es tu estado natural

Facebook
Twitter
WhatsApp
Telegram
LinkedIn

Busca alguna cosa

Sobre Esfera Mataró

Esfera Mataró es un centro de formación en terapias naturales: Acupuntura, Qi Gong MTC, Reflexoterapia, Flores de Bach, Flores Findhorn, Aromaterapia, dietética, Reiki Uksui, entre muchos otros.

Artículos recientes

¡Subscríbete a nuestro boletín!

Subscríbete a nuestro boletín para recibir información sobre eventos, noticias, articulos o novedades sobre nuestros cursos de formación para terapeutas de las terapias naturales y alternativas.