Quédate y descubrirás unas cuantas cosas muy importantes sobre esa decisión y de paso sabrás si tu decisión es correcta o es una fantasía para salir de una situación personas de manera fácil y sin esfuerzo porque te has imaginado que se gana mucho dinero con las terapias.
Será un poco más largo que los artículos habituales, pero te aseguro que si llegas al final te vas a llevar unas cuantas sorpresas que te darán que pensar durante un buen rato y que pueden cambiar o reforzar tu visión de vida.
En esfera, desde hace tiempo, hacemos una entrevista a todas las personas que se acercan al centro con el objetivo de aprender, obtener información, curiosear o mirar cómo está la competencia para hacer lo mismo un poco más barato también, algunos incluso, porque quieren ser terapeutas profesionales.
Desde ese hace tiempo, decidimos hacer una entrevista debido a la experiencia en años enseñando y acompañando, nos fuimos dando cuenta que básicamente hay dos tipos de personas que quieren ser terapeutas.
Sin discriminar a los que su único objetivo es aprender para ellos y para sus seres queridos y cercanos, porque esos también tienen su espacio aquí por lo que verás a continuación. Y vaya si lo tienen.
La primera tipología es la que nos gusta y que coincide con el anterior, el que quiere aprender, el que busca un espacio seguro, fiable, que le de información, mucha y muy buena información.
Para no solo aprender de la materia que se dé, sino para crecer como persona, para tener más recursos, como parte de su camino de vida de comprender y ver qué es y que ha venido a hacer a este mundo.
Con un perfil claramente cuidadora, educada, respetuosa, con trazos de sanadora, curiosa, algo emprendedora, en procesos de cambio, de buscar algo más, de mejorar su situación interna y externa.
La segunda tipología es la que no nos gusta, buscan algo que sea muy rápido, que no les suponga mucho esfuerzo y si es ninguno mejor. Quieren asistir pocos días a clase y si es online mejor.
No quieren exámenes ni pruebas, solo el título, que sea todo rápido y empezar a ganar 50 euros la hora durante 8 horas o menos y 4 días a la semana o menos, para darse la vidorra que creen que se merecen.
Estos, ya te digo ahora, que lo pueden vestir como quieran, pero estos ni son, ni van a ser terapeutas, ni se van a formar con nosotros.
¿Cómo los podéis distinguir?
Hemos creado un protocolo en el que se pasan dos primeras evaluaciones personales, ahora con este escrito y con el vídeo que haremos después, tendremos cuatro evaluaciones o cuatro niveles iniciales que pasar, de manera que nos quedaremos con los que de verdad sirven y tienes ganas de ser aprender y crecer tanto personal como profesionalmente.
Primera evaluación. El contacto inicial.
Generalmente por mail o por WhatsApp ya indica si esa persona tiene ese algo especial que tienen los buenos terapeutas, y lo entenderás al momento: “El trato personal”.
Tal cual, hay un instinto cuidador y educado que nace y se nota, la manera de contactar ya te dice muchísimo, quizás no llegue a un 50%, pero casi.
Ya sabemos o deberíamos saber que la primera impresión es la que cuenta y qué es muy difícil cambiarla después.
La misma impresión que t estoy generando ahora si es la primera y que ya me sirve para acercarte o alejarte de esfera y que lo hago conscientemente y con un objetivo muy claro y definido.
Cuando alguien se ponga en contacto contigo y no se presente, no te pregunte ni tu nombre, ni con quien puedo hablar para conocer un curso o un taller, que ni un solo saludo de hola.
¿Crees que puede llegar a ser terapeuta?
Si claro que puede, si estudia en algún sitio y le dan un título, por desgracia puede, ¿pero que tipo de terapeuta va a ser?
Efectivamente, ya vamos coincidiendo.
¿En serio que te gusta cuidar de las personas, te preocupa su salud, que mejoren, sientes que puedes aportar, sumar, acompañar y envolver, y no tienes ni la mínima decencia de saludar primero?
Por favor, seamos decentes aunque sea solo para nosotros mismos y no nos engañemos porque vamos a vivir una mentira vital.
Esto es una forma de vida, esto es una filosofía ancestral que viene de os orígenes de la humanidad, es una vocación, una manera de ver, de sentir, de interpretar, no es un negocio ni una fuente de dinero fácil y sin esfuerzo.
¿Pero el dinero también es importante si quieres ser terapeuta?
Por supuesto, y se gana bien si eres una buena terapeuta, pero ese no es el objetivo ni puede serlo. Ese es el extra que te va a permitir vivir de lo que te gusta y si lo haces bien, dentro de entre 3 o 5 años, estarás ahí.
¿Tanto se tarda en llegar a poder vivir haciendo solo terapias?
Si, y más con todo el intrusismo que hay desde escuelas que forman rápido, barato y online, y con todo lo que están formando que se creen que son terapeutas por haber aprendido 4 protocolos de una o dos terapias como mucho.
Antes en entre 1 y 3 años era el tiempo establecido para un 10% de los que estudiaban terapias.
Ahora ha subido el tiempo y el esfuerzo porque tienen que darse a conocer junto a grandes expertos en redes sociales que lo hacen muy bien, parecen muy buenos y después son un desastre y una vergüenza para el sector, pero de momento venden y muy bien y nos hacen quedar mal a todos porque no obtienen resultados.
La gente se va hacía ese aparador tan vistoso y espectacular y después se van decepcionando y no vuelven porque no ven resultados y se decepcionan, no de ese intruso, sino del sector.
Cada mes tienen que abrir nuevas oportunidades, vivir de ofertas, buscar muchos centros a los que exprimir usuarios que ya son asiduos y siempre volver a empezar y volver a empezar.
¿Por qué?
Porque no están preparados, no se han formado bien y no llegan nunca a descubrir la rueda del tiempo.
Es esa rueda en que cuando hace un giro del tiempo suficiente, todo vuelve multiplicado.
Si haces bien la formación, en un centro adecuado, si aprendes bien etc, la rueda te traerá diez nueve personas por cada usuario que hayas tratado, ayudado, acompañado y te hayas ocupado de aportarle las mejores herramientas para mejorar su bienestar y su calidad de vida.
Si no lo haces bien ese proceso que decimos, mejor ni te cuento, buenos si, la rueda vuelve una y otra vez vacía. Y así hasta que te canses de hacer girar la rueda porque nunca girará sola.
Y todo empezó en tu primer contacto, que fuerte, ¿eh?.
¿Por eso hacéis la entrevista?
Exactamente, por eso tenemos estos niveles de acceso para poder ser alumna de esfera, por ti, por mi y por la responsabilidad hacia las personas que llegarás a tratar algún día.
Y no te pierdas que después del primer contacto, viene el segundo y las respuestas inverosímiles que pretenden que nos adaptemos a ellos con una rigidez impropia de los que tienen ese algo especial para ser terapeutas.
Dime precios.
No quieren saber nada más, ni de qué va el curso, ni si es fiable, ni las horas lectivas, ni las de casa, solo precio.
Algunos responden que es por su situación personal de la que quieren salir, pero sigue siendo inapropiado y muy mal enfocado.
En el sistema sanitario que tenemos, cuando llegas a urgencias hay un triaje, y sigue unas normas mayoritariamente eficientes.
Se sabe que lo primero que responde el paciente entrante, es lo más importante, lo que peor está, lo que más le duele etc.
Ese sistema no les permite a los sanitarios dedicar demasiado tiempo a esa primera atención y van con el reloj de los recortes apurando cada pregunta, por lo que tienen que concretar y salir corriendo lo más rápido posible.
Efectivamente, lo primero que decimos es lo que nos importa, da igual si es por una razón o por otra, esa es nuestra presentación.
Da igual que sea por ser de los interesados en cursos rápidos y baratos o si es por la situación personal.
Tendremos móviles de 600 euros, 200 canales de pago por la caja tonta, peluquerías de 80 euros, plays de 2000euros, televisores de no se cuantas pulgadas, pero después no sabremos de dónde sacar el dinero para hacer un curso que puede cambiar nuestras vidas.
Lo siento pero no me sirve. Yo he tenido que hacer de todo para conseguir cada formación que llevo conmigo al igual que los profesionales que me rodean, y sobre todo, he priorizado.
Durmiendo en trenes, haciendo horas extra, madrugando, haciendo lo que hiciera falta para tener esa formación.
Los hechos se comen a las palabras y a las justificaciones.
Lo primero que preguntas te define, y lo segundo también.
¿Y cuál es la respuesta que te encuentras?
Pues depende de la respuesta contesto para que se desmotive y no venga o busco que venga, hay dos maneras de escribir que adaptas a cada situación.
Es como las terapias, no hay un protocolo, es todo personalizado.
Algunos se atreven a dar ordenes y venir a tu casa a decirte lo que tienes que hacer. Imagínate si llegan a ser terapeutas que tipo de controladores tendríamos.
Lo primero es saber el precio y los horarios y después si me interesa ya me diré algo.
¿Pero quién te has creído que eres? ¿Te imaginas que viene alguien así a tu casa y te dice como tienes que poner la mesa, lo que le tienes que ofrecer como invitada, que decida ella donde va a sentarse y a distribuir al resto de comensales?
No verdad, pues imagina si ese egocentrismo llega a tener una formación y tratar con personas lo que puede llegar a hacer.
Y aquí solo vamos por la segunda prueba de acceso a Esfera.
Porque somos responsables de las personas que tratamos y de a las que les transmitimos nuestros conocimientos y sobre todos de las personas a las que trataran en un futuro cercanos.
Nuestro porcentaje de alumnos que se van dedicando a las terapias es superior a la media, muy superior.
Grupos cercanos, familiares, con valores, coherentes y en crecimiento que buscan un cambio interior y exterior, crecer como personas y algún día acompañar a otras en ese mismo camino, lo mismo que hemos hecho nosotros.
Si te molesta o te cuesta encontrar la prioridad para venir a hacer una entrevista, ya me has contestado y me has dado mucha información sobre ti.
Conocer el centro, su ambiente, su energía, las sensaciones y emociones que transmiten las paredes, la claridad, la resonancia, eso solo puede hacerse pidiendo una entrevista y compartiendo unos instantes in situ.
Pera finalizar, recuerdo, y más de una ve me han respondido así: es que no quiero ni perder el tiempo ni hacértelo perder a ti, dime el precio y los horarios y si me van bien después hablamos.
Te voy a ser muy claro y sincero, ya por el simple hecho de conocerte, es imposible que pierda mi tiempo, y si no entiendes esto, no vengas.
Si por el contrario lo has entendido, ponte en contacto con nosotros porque es muy probable que este sea tu centro y tu casa.
Y ahora, si has llegado hasta aquí y te lo vuelvo a preguntar; ¿Quieres ser terapeuta?, ¿de verdad?, ¿qué tipo de terapeuta?, Pues aquí tienes tu espacio, pide tu entrevista y conozcámonos.