Si eres una persona exigente buscaras un terapeuta y un centro con garantías y formaciones exigentes. Si eres una persona que se esfuerza y dedicas horas a aprender desde la humildad, encontraras esos centros. Por el contrario, si eres una persona que te crees cualquier cosa y no lo compruebas, que quieres solucionar tus problemas sin esfuerzo, que te hagan lo que aún no has aprendido a hacer por tu propio pie, que quieres que los otros decidan por ti, etc., pues te vas a encontrar con eso, con charlatanes, y hay bastantes en este sector.
Después de años de observación e interacción, oyendo hablar a un tipo de terapeuta u otro, y a riesgo que ellos aprendan a camuflarse más aunque su naturaleza siempre acabará saliendo a la luz, te voy a contar un par de detalles que los puedas identificar rápidamente.
Detalles para distinguir al charlatán del terapeuta:
Su puesta en escena es espectacular, su necesidad de demostrar es tal que parece que entres en templos elegidos por dioses en vez de centros de terapias.
Aunque cada vez menos, les gustan los disfraces y las vestimentas particularmente diferentes con sobrecarga de símbolos y objetos aparentemente milenarios de gran poder y descendientes directos de seres de renombre. Simplemente para impresionar y causar un impacto psicológico y que sepas que estas ante alguien elegido.
Hablan y hablan pero no te dan soluciones a tus problemas alegando que es parte de tu vida, si es así por algo será, todo es por algo, si ni lo ves es que no lo quieres ver etc. que tu subconsciente, que si en otra vida…blablablá… pero soluciones, cero.
Buscarán tu pleitesía y que quedes enganchada a formaciones interminables que algún día descubrirás que son sucedáneos de otras formaciones más serias. Aquí la especialidad es ir poniendo niveles para que en vez de arriesgarse a renovar con la gente, ir manteniendo y sectarizando a los adeptos que le van a defender a ciegas.
Personalizan sus propias formaciones como si fueran suyas. Los seres que conozco que han materializado formaciones realmente impresionantes y llenas de conocimiento y sabiduría, nunca dicen que son suyas y no ponen su nombre en ellas porque saben que son de todos y que esas formaciones se han materializado como resultado del crecimiento de conciencia del planeta.
Siguen hablando y hablando y siguen sin dar soluciones reales a tu problema.
Si mejoras ellos son elegidos y si no es que tus resistencias o tu ego no te dejan crecer, avanzar o evolucionar.
Hablan mucho de ellos, se venden constantemente con sus iluminaciones y casi hablan más de ellos que de ti, la verdad es que, entre tú y yo, lo tuyo dudo que les importe más allá de la anécdota de que te han salvado o no querías ser salvado y del dinero que le vas a dar.
Les brillan los ojos al ver el dinero.
Hablan superficialmente de cosas que han ido oyendo que no aprendiendo cómo hace el buen terapeuta, pero no profundices mucho porque descubrirás que saben lo justo y necesario. Las cuatro patologías comunes, los cuatro caminos básicos de vida, y si no, ya sabes, tus resistencias no te dejan avanzar. Últimamente en los campos cuánticos que tanto se han puesto de moda es muy común oír como hablan de la física cuántica aplicada a la sanación con los argumentos de la teoría de la relatividad. Mejor sonreír que llorar.
Si les pones en duda o pones en duda lo que dicen, se ponen nerviosos, cambian su tono de voz y te acusan al estilo Torquemada buscando brujas. Como has osado poner en duda al gran maestro, gurú o elegido, eres un hereje.
Quieren vivir bien con poco esfuerzo o ninguno.
Hay una frase que te puedes marcar a fuego en tú conocimiento: Te dicen que te van a curar. Y eso es de las mentiras más grandes que te puede soltar cualquier persona. Un terapeuta profesional jamás te dirá eso. Tú sanas y tú enfermas. Esos que van de salvadores del mundo y te van a curar; charlatanes. Un terapeuta profesional tiene los conocimientos suficientes cómo para no decir semejante barbaridad.
Desde el minuto uno en que han cogido tu confianza, te dicen lo que tienes que hacer. El imperativo es el tiempo verbal que más usan para afianzarse por encima de ti e ir menguando tu autoestima.
Su elemento preferido es el miedo y en esto si que son profesionales, ya que eso lo practican cada día con todos los que pasan por su vera y pueden conseguir un adepto en cualquier lado porque son salvadores las 24 horas del día. Las palabras son distintas pero el significado solo es uno: Si no hace lo que te dicen te van a pasar cosas malas.
Tienen un proceso evolutivo en que te quitan la libertad y la capacidad de decisión porque ya deciden ellos por ti. Claro que el permiso lo das tú pero si lo detectas, ya no entrarás en esa comodidad porque sabrás que realmente te perjudica y te hace retroceder en tu proceso evolutivo y crecimiento personal que otra persona decida por ti.
Hacen que dependas de ellos y este es su alimento, una vez pierdas la capacidad de decisión entrarás en un proceso de carencia y necesitarás cada vez más consultar dudas y aclarar conceptos. Siempre habrá cosas nuevas que nunca podrás solucionar sin su ayuda.
Se quieren sentar y sentir siempre por encima de ti. Y eso es uno de los detalles más sutiles y comunes de los charlatanes, si entras en un taller, están sentados por encima de ti, a una altura “superior“ para generar este efecto psicológico y para ellos consciente. Si estas en consulta estarás en una silla menor, más pequeña, incomoda etc.
Son muy aficionados a las frases místicas que ni entienden ni pretenden que las entiendas. Les encanta las frases de que cuando estés preparado aparecerá el maestro… Hoy en día ya todos deberíamos saber que todos somos maestros y alumnos a la vez y estar en proceso de aprender que no hay ni maestros ni alumnos.
Sus vidas personales son un desastre y la mayoría van de seductores escondiendo un vacío enorme. En otras palabras, no son ejemplo y ahí se descubre su verdad, la del charlatán que predica lo que no práctica.
Sus frases son sus carencias y sus talleres los espejos de lo que aún no han descubierto.
Todo es fantástico hasta que todo es un desastre. Y es así, después de una presentación espectacular donde te han seducido con todas sus hormonas, se da un giro tan brutal como inesperado que tu mente no detecta si no estás advertida. De repente aparecen todo de problemas inverosímiles. Tuyos, suyos, que si el karma, que si en otra vida fuimos, que si conexiones especiales, que hay que limpiar esto, que llevas un mal de ojo, que alguien te cercano de la familia o el trabajo te quiere mal, que si llevas algo pegado, que vibras bajo, es como las excusas de un niño al que pillas haciendo algo malo; siempre son las mismas.
Sobre todo y fácilmente detectable: Siempre pretenden que estés mal y crean unas historias fabulosas que solo ellos pueden ver para curarte y seguir curándote. Con la excusa de ir quitando capas podrás oír auténticas barbaridades que no cuento por respeto a los que he visitado y que después se han reído entendiendo que fue parte de su receso de aprender a distinguir el grano de la paja.
En definitiva, como puedes ver, vivo una vida fabulosa y llena de experiencias intensas mientras me dedico a que las terapias y los charlatanes sean reconocidos. Unas para que sean incluidas en nuestra sanidad y otros para que la gente los detecte y no los confunda con los profesionales.
